El Grupo Senderista Palmeño (GSP) está tan pletorico de energias ultimamente que hemos conseguido realizar dos actividades en el mismo dia, como estaba anunciado.
Esta es la crónica del sendero de Santa Maria de los Angeles que hemos realizado conjuntamente con unos nuevos amigos pertenecientes a la Asociacion Ciclista o Peña de Aguilar de la Frontera, que , como me ha explicado mi nueva amiga Remedios, tienen en su seno una sección senderista.
Actividad: Sendero de Santa Maria de los Angeles
Salida: Desde el Centro de Interpretación "Huerta del Rey" del Parque Natural de Hornachuelos
pasamos por las ruinas del antiguo Seminario de los Angeles, y
finaliza en el embarcadero del Pantano de Hornachuelos.
Distancia recorrida: Anduvimos , como siempre con dudas, unos dicen que 16 kilometros y otros que 13, asi que nos vamos al término medio: 14,5 kilometros.
Duración: 3 horas 30 minutos
Dificultad: media-baja
Participantes: 38.
Comenzamos a andar un poco tarde porque era obligado esperar a nuestros nuevos amigos de Aguilar, y en su honor, cambiamos nuestra actividad anunciada para convertirla en un sendero casi circular que comienza de forma aburrida con un par de kilometros de carretera, para girar a la derecha por el camino del eremitorio y convento de Los Arenales, en una hora que resultó bastante concurrida de vehículos con familias serias y emperifolladas que supuestamente ( nos imaginamos) asistían a la misa de 12 en el convento.
Cuando dejamos atras el convento, comenzó el verdadero sendero de los Angeles, y pudimos admirar y comprender por qué este nombre, porque realmente este sendero se interna en el cielo: es tal la profusión de bosque mediterráneo, la compleja mezcla de chaparros, quejigos, acebuches y matorral levantado tras las últimas lluvias, que el bosque triunfa en una mezcla incomparable de tonalidades verdes y pardas. ..
... y este elevado bucolismo se nos vino al traste al encontrarnos una vaya cerrada a cal y canto.
En fin, que hubo que gatear un poco para sortear la dichosa vaya. pero merecio la pena.
En un suave descenso de unos 3 kilometros por la antigua carretera del seminario bordeado de antiguos tocones de piedra cubiertos de un moho espeso y verde, llegamos al seminario desde donde pudimos admirar el pantano, las buitreras a lo lejos y las propias ruinas del seminario que gozan de un lugar privilegiado.
¡ que pena de abandono de un edificio tan magnífico y bien situado!
Dejamos atrás la cruz y en fila de a uno, iniciamos el descenso hacia el embarcadero, primero muy prolongado, hasta llegar a la fuente de los tres caños y después suave y siempre bello, hasta llegar a eso de las 14:30 al embarcadero , donde un poco mas allá esperaba el autobús de nuestros amigos, que amablemente nos acercaron de nuevo al centro de interpretación, donde finalizó nuestro sendero, como siempre con un pantagruelico almuerzo.
Y como siempre, Fernando se ha llevado su bota de vino aunque sigue sin soltar la fórmula del mágico combinado que prepara , que cuando lo ingieres desaparece el frio y te impulsa a subir más cuestas de las que en realidad hay.
Invitamos a Juan a insertar la crónica de la via verde del Muriano que igualmente ha tenido que ser un magnífico paseo, y agradecemos a nuestros nuevos amigos de Aguilar su presencia y su compañia. esperamos que haya muchas otras ocasiones de compartir esta pasion.
1 comentario:
Hola! Soy uno de los senderistas aguilarenses. Estoy encantado de haber participado juntos en esta actividad, espero repetir en un futuro. Os dejo el enlace de mi blog con algunas fotogafías del sendero: http://memoriadeunafoto.blogspot.com/2011/02/sendero-por-hornachuelos.html
Un saludo
Publicar un comentario