Se preveía una mañana calurosa de primavera, eran las 8 de la mañana y en Palma ya se iba notando la temperatura, pero estábamos deseosos de realizar este sendero ya que lo habíamos retrasado por la lluvia y lo cogimos con bastantes ganas💪
Éramos 15 socios y a nuestra llegada a Villanueva del Río y Minas, nos dividimos en dos grupos, unos partimos del puente andando y otros llevaron los coches cerca de las ruinas, a unos 2 km para que a la vuelta no nos pillara la calor, ya que se preveía por encima de los 35°🌡️🥵
Partimos de las proximidades del núcleo urbano, enfrente del puente de Hierro sobre el Rivera del Huéznar dirección hacia el Norte, en las primeras estribaciones de la Sierra Morena sevillana🌄
Pasamos por el lago del Mirador👀, que se localiza a pocos metros del puente de Hierro, ocupando el hueco de extracción de una antigua explotación minera a cielo abierto, que se llenó con agua subterránea una vez abandonada la actividad.
La leve subida lleva directamente a la cancela de entrada a una finca. Aunque esté cerrada, se puede abrir el cerrojo y pasar sin problemas➡️🚪
El paisaje da paso a una bonita dehesa por la vía pecuaria “Cordel de El Pedroso” con abundante vegetación de olivos, encinas y una rica fauna🌾🌳
Incluso un ciervo andaba por ahí, mezclado ya con sus muuu amigas las vacas🐄🦌🐄
Después toca bajar a un pequeño valle que ya sí da acceso al antiguo asentamiento romano de Munigua🔱
Al fin a los dos kilómetros más o menos hayamos las ruinas del santuario de terrazas sobre un cerro, apreciamos la silueta de una de las ciudades romanas más bellas e insólitas de todas las encontradas en la Península Ibérica: Munigua - Municipium Flavium Muniguense. Mulva Munigua 🙌
Unas placas de metal con flechas van indicando qué ruta seguir ➡️
El Municipium Flavium Muniguense se emplaza en la serranía sevillana, sus orígenes se remontan al siglo IV a.C., aunque es la ciudad de los siglos I-III d.C. la que confiere al espacio arqueológico la imagen que hoy se puede contemplar.
Como nos informa e indica el veterano del grupo➡️📑
Munigua tuvo su esplendor del siglo I d.C al III, hasta que un terremoto inició su decadencia. Las ruinas, que son un Bien de Interés Cultural, constan de unas termas (como se aprecia en la foto), de una muralla, de un Foro, de un templo de Mercurio o una necrópolis, entre otras construcciones.
Domina la ciudad el imponente Santuario🏛️ en terrazas que se yergue majestuoso sobre el paisaje que lo circunda, dedicado al culto de Fortuna⚖️ y de Hércules🔱.
A la izquierda la Aedicula de Mercurio que es un templete donde se exponía la figura de la divinidad y es dónde nos hicimos la foto de portada
Contamos con la inestimable ayuda de nuestro querido socio Pepe Milán que hizo voluntariamente de guía📝☝️ para explicarnos parte del itinerario🗺️ por el enclave arqueológico de Munigua, GRACIAS!👏
Retomando la ruta y la época actual, de vuelta nos encontramos un hallazgo muy extraño🤔, un hongo gigante que emergía a la superficie en forma de seta que nos llamó poderosamente la atención!🍄🔍
Esta vez no se cumplía el dicho de "seta a la vista no crece ni pizca"
Y además tuvimos el inmenso placer de estar acompañad@s durante el camino con dos nuevas socias Maricarmen y Lucía, madre e hija ¡a pesar de que parecen hermanas!👩👧😉
Aunque esta actividad en principio estuvo programada para hacerla con más recorrido (~15 km) tuvimos que acortarla debido al posible calor que iba a hacer e hicimos al final un sendero de ida y vuelta de alrededor 12 km.
Debido a las altas temperaturas alguno que otro se paró a tomarse unas cañitas en una barra improvisada que apareció por arte de magia🎩 al lado de donde teníamos aparcados los coches!!😅🍻
En fin, la primera ruta de senderismo arqueológico de este año, resultando ser una ruta muy interesante y fácil de hacer para cualquier edad, con un gran aliciente al visitar el maravilloso enclave arqueológico romano de Munigua y que resultó ser sumamente cómodo, sobretodo a la vuelta!🚗↩️😅
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