Entorno: Sierra del Camorro, en Cuevas de San Marcos ( Málaga)
Asistentes: 21 socios
desnivel : 485 m
kilometros: 8 km
tipo: circular
Dificultad: Media Alta.
Cuando propusimos esta actividad la calificamos de media sin conocerla. Ahora que la hemos cubierto podemos afirmar que mas bien es media- alta con algunos tramos muy exigentes.
Nos hemos desplazado en nuestros popios vehiculos y ya a las 9 de la mañana estabamos desayunando en el pueblo, en el bar los almendros, cuyo camarero que le pillo solo la tromba naranja, se asustó y puso muchos impedimentos para hacernos las tostadas, que sabiamente las cambio enviandonos a comprar churros enfrente.
Comenzamos el sendero desde el centro de interpretación, que como ya es habitual en estos centros en el que se ha tirado el dinero, se encuentra cerrado, en un leve y facil ascenso por una pista de tierra que en el kilometro dos se estrecha y dificulta y finaliza en un pequeño mirador, desde el que se aprecia una hermosa vista de la cabecera del pantano de Iznajar.
Desde ese punto comienza una via ferrata con un fuerte ascenso y casi sin señalar el camino que hemos de subir, ayudandonos de restos de una antigua baranda y nuestrs cuerdas.
En este punto , dada la enorme dificultad que presentava la via ferrata, ya se volvieron 10 de los asistentes que se acercaron por otro camino a la cueva de Belda, y prefirieron esperarnos a la sombrita del centro de intrpretación.
Los demás seguimos ascendiendo penosamente casi gateando piedraa piedra, y ayudandonos de
cuerdas, hasta coronar con muchisimo esfuerzo el cerro del Camorro. desde alli, seguimos cresteando por la ladera sur de la sierra, en dirección este, a veces gateando por piedras, a veces intentando descubrir la perdida senda y siempre ayudandonos con el GPS pero con la duda no confesada por nadie de que nos habamos perdido.
Asi caminamos un largo trecho, hasta la una y media, donde poco a poco fuimos siguiendo una brevisima senda que giraba hacia el noroeste, hasta llegr a una enorme y lisa pared donde estaban haciendo escalada y nosotros pasamos por abajo.
Ahora ya en continuo y peligroso descenso, con muchas piedras sueltas y sobre todo tierra suelta, hasta el punto de que hubo que arrastrarse e varias ocasiones. hasta que llegamos a las puertas de la cueva de Belda, en que todos decidieron subrir las empinadas escaleras que llevan hasta ella y visitarla , excepto Fernando y Juan que ya estabamos hartos de tanta escalera y teniamos el nivel de cebadaen sangre un poco bajo.
Con todo terminamos a eso de las tres de la tarde, con bastante calor y muy cansados, pero
satisfechos de haber cumplido este dificil sendero, asi que para celebrarlo nos fuimos otra vez l bar de los almendros a tomarnos algunas cervzas y bocatas, y despues a visitar el pantano de Iznajar, con lo que a las cinco de la tarde dimos por concluido el sendero y emprendimos lavuelta a casa.
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